jueves, 18 de febrero de 2010

200 programas y un millón de euros


El circo más famoso de la televisión está durando mucho más de lo que algunos podíamos y queríamos imaginar. Parece que fue ayer cuando respiramos aliviados al ver que “Aquí hay tomate” abandonaba la parrilla de Telecinco. Eso sí, también es cierto que por la cabeza de todo el mundo pasó la idea de que sus protagonistas no podrían estar en el paro mucho tiempo. Poco más de un año después Jorge Javier Vázquez reapareció, y sabíamos perfectamente cuál iba a ser el estilo de su nuevo programa. Para celebrar sus 200 tardes y noches han montado un cabaret lleno de luces e intentos de glamour; todo parece perfecto en ese plató/escenario en el que todos gritan y actúan a más no poder. Pero no es así, ellos también saben pifiarla, y bien.

En la página Web de Telecinco el presentador de "Sálvame" es portada, pero no sólo ahí. En las respectivas secciones on-line de “Televisión” de los dos principales diarios generalistas españoles, El País y El Mundo, también aparece hoy en lugar preferente, pero por motivo distinto. En ellas no hay celebraciones, ni tan siquiera se hace mención al número de programas emitidos. Resulta que parte del espectáculo que genera este espacio consiste en engañar a los espectadores, esos que se dejan increíblemente grandes cantidades de dinero en animar el rótulo que aparece durante la emisión en forma de mensajes de texto.

Está claro que para saber en qué ha consistido el error y el engaño tendremos que recurrir a los medios objetivos en este asunto; Telecinco no nos va resolver la duda porque allí están muy entretenidos realizando una encuesta sobre el mejor momento vivido en el programa. Después sabremos cuál va ganando, por supuesto. El caso es que un espectador que había participado en el último concurso y al que ayer llamaron en directo se creyó rico durante unos instantes: el famoso rótulo y el propio presentador se preguntaban si alguien sería tan afortunado de conseguir un millón de euros en lingotes de oro. Lo que no sabía Jorge Javier era que, al tratarse de la segunda llamada (minutos antes habían realizado otra en la que saltó un buzón de voz), las bases del concurso estipulan que el premio será de un lingote con valor de 1.200 euros. Lo mismo da, vamos. Así sucedió todo:




La cantidad que se llevó el espectador queda totalmente cubierta por una tarde de llamadas y mensajes de algunos fieles seguidores de este circo televisivo, por lo que, si de los directivos de la cadena y del programa dependiese, pedirían a todo los participantes que activasen el buzón de voz. Si lo pidiera Belén Esteban más de uno lo haría con los ojos cerrados. Porque ella es la líder absoluta de “Sálvame”. Todos se hacen pequeños al lado de la Esteban, y sobre todo ahora que baila. Es la estrella del programa y se puede decir que de toda la cadena. Ahora cumple veinte años de emisiones y una de sus señas de identidad es la operada ex de Jesulín. Y hablando de la operación, antes hemos dicho que en la Web de Telecinco están realizando una encuesta para saber cuál ha sido el mejor momento de estas 200 emisiones. Gana con diferencia ella. Quiero decir, ella, la de ahora, justo en el momento en que engordó aún más su cuenta corriente al reaparecer después de su cambio de imagen.

Buena muestra de la importancia de “Sálvame” fueron las pasadas campanadas de Nochevieja. Belén Esteban y Jorge Javier, mano a mano y uva a uva. Está claro que a este par de dos les queda mucho por vivir en la cadena estrella de la telebasura y muchas campanadas que dar, tanto para bien como para mal, animando o desilusionando a quienes los ven día a día.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Palabras


Leer, escribir, hablar, pensar..., nada de eso se puede hacer sin palabras. Si nos paramos a reflexionar sólo unos segundos nos daremos cuenta de que en cualquier momento del día, hagamos lo que hagamos, las letras están ahí. Además, quienes estamos decididos a vivir de y con ellas las valoramos aún más. Por eso es muy sencillo rellenar unos pocos párrafos, aunque no cualquier momento es el perfecto para hacerlo. En apenas un instante aparecen ideas que reflejar en un papel o una pantalla y hay que aprovecharlo, por absurdas que parezcan. Si además se pueden difundir de alguna manera, mejor que mejor.

Cualquier persona puede contar algo, exponer su opinión, informar de un suceso; soportes no faltan. Uno de ellos es la revista que publica la Biblioteca Municipal de Villafranca de los Caballeros y en la que todo aquel que quiera puede enviar sus palabras hechas artículo o relato; yo lo he hecho. Ayer fue colgado en la Web su segundo número y en ella ya se pueden consultar todas las novedades bibliográficas y audiovisuales que han llegado a sus estanterías, además de las noticias sobre lo que han hecho y van a hacer en ese renovado espacio. Porque todo en apariencia es nuevo: los muebles, los ordenadores, el edificio en sí, etc. Pero nada más lejos de la realidad. La biblioteca cumple este 2010 un cuarto de siglo de vida y esa experiencia se deja ver en cada documento que allí se puede encontrar y en la confianza de los usuarios habituales, de los ocasionales y de los que están por llegar.




El artículo que escribí en sí es lo de menos. Lo relevante es la importancia de poder contar las cosas, sean del tema que sean, y de que haya quienes estén dispuestos a escuchar y albergar nuestras palabras. Todo por que no nos pase nunca lo que se cuenta a continuación:



Silencio ensordecedor

La última vez que hablé de él le llamé “El espulgador”. Según la RAE, la primera acepción del verbo espulgar es limpiar de pulgas o piojos. Quizá sea exagerado vincular a una persona con esa definición, pero para más de uno algo muy parecido a eso es justamente lo que hace Hugo Chávez, presidente de Venezuela y último protagonista de esa historia interminable llamada censura.

Desde que asumió el poder del país hace 11 años sólo se ha escuchado más alto la voz de la oposición que la suya en una ocasión. Fue un golpe de Estado que duró apenas dos días. Desde entonces únicamente manda él, solamente se escucha su voz. Como cualquiera, quiere defenderse de quienes le critican y una de las múltiples formas de hacerlo es cerrando periódicos y cortando la señal a radios y televisiones poco afines a él.

En enero cortó la señal de Radio Caracas Televisión Internacional (RCTVI) por no difundir sus discursos. Años antes le había prohibido emitir en abierto. Lo mismo hace con todas aquellas empresas no estatales que no cumplan las leyes. En otros aspectos de la vida de un país no relacionados con la palabra se podría asumir esta obligación de silencio. Sin embargo, al periodismo no se le puede pedir eso, y mucho menos en la época en la que vivimos.

Las aparatos de televisión de Venezuela difunden sus mítines y discursos a la hora estipulada. Los de radio, además, hacen sonar el himno nacional estrechamente ligado a la figura de su presidente. Pero hay más soportes. Internet es, sin duda, el que más daño puede hacer a Chávez. Los propios venezolanos de la oposición y la opinión pública internacional saben lo que está pasando y lo cuentan a través de blogs accesibles a casi todo el mundo. La calidad en la redacción es lo de menos porque el mensaje llega, y ya que allí los medios de comunicación no pueden hacer su trabajo con libertad, cualquier emisor vale si con ello se consigue que la situación cambie.


martes, 16 de febrero de 2010

Las ovejas negras del ejército franquista


Mucho hemos oído hablar sobre la Revolución de los Claveles que acabó con la dictadura en Portugal en abril de 1974. Pero poco se ha hablado de la repercusión que tuvo este levantamiento en el otro lado de la Península Ibérica. Es alguna de las cosas buenas que tienen los medios de comunicación. Ver un informativo o echar un vistazo a la Web de un periódico siempre es bueno, podemos enterarnos de cosas realmente interesantes de las que no teníamos ni idea.

La Unión Militar Democrática (UMD) miró al otro lado de la frontera y pensó que los cambios realizados en Portugal podrían aplicarse también en la entonces férrea España. No soñaban con nada demasiado especial, si no fuese porque el régimen franquista ni se planteaba realizar las reformas que pedían. Democracia, derechos fundamentales de los ciudadanos, reformas sociales y económicas... Todo ello se daba ya por hecho en el resto de países europeos ya liberados de dominaciones dictatoriales, y los militares que formaron esta organización “rebelde” deseaban llevar la transformación pacífica tanto al interior del ejército como al resto de la estructura política y social del país. Al régimen de Franco le quedaba poco tiempo de vida y aún así fue imposible encontrar en él una simple grieta por la que introducir algo de libertad.

Treinta y seis años después se ha condecorado a quienes formaron la UMD. Lo que más valoran no es la medalla que les han puesto en sus uniformes, esos que tuvieron que guardar en el armario tras ser detenidos por el régimen y retirados de sus cargos. Lo mejor para ellos es que se reconozca y se valore su esfuerzo y su deseo de lucha contra el pequeño gigante que ocupaba el poder. Hoy en día parece casi ridículo que se premie a alguien por pedir democracia y buen nivel de vida. Pero es que eso eran palabras mayores. Tanto que apenas un año después de la fundación de esta organización, cuando los mandos del ejército se enteraron de su existencia, la desarticularon con contundencia mandando a sus miembros a la cárcel.

Como suele ocurrir con estas actividades prohibidas, muchos de quienes las realizan no llegan a reconocer nunca su participación por miedo a represalias. Hoy han sido solamente catorce los militares condecorados, pero puede que hubiera cerca de doscientos durante los meses de más auge de la UMD, además de todos aquellos que solamente compartieran sus ideales de uniforme para dentro y no mostraron nunca su adhesión.

Hasta 1987 no pudieron recuperar sus puestos, después de que la Ley de Amnistía que llegó con la transición y la monarquía solamente les liberara de sus penas de cárcel. Ha sido en la última década cuando más reconocimiento han recibido. Su labor en la llegada de la democracia a nuestro país siempre ha sido reconocida por unos y negada por otros, como ocurrió en 2002 en la votación de una proposición no de Ley en la que un diputado socialista y antiguo miembro de la organización, Carlos San Juan, pedía el reconocimiento de la UMD en la consecución de las libertades. El entonces gobierno popular y su mayoría en el Congreso la rechazaron. Lo cierto es que, por lo que parece, no se puede asociar a un grupo de militares antifranquistas con una línea política concreta de las que existen actualmente. La simple existencia de partidos ya lucha contra cualquier régimen antidemocrático y, por tanto, la tendencia a la izquierda o la derecha de sus miembros no es reseñable.


La noticia de la condecoración a los militares de la UMD se podría resumir con esa frase hecha de “más vale tarde que nunca”. Que unos reconozcan su papel en la transición democrática y otros no, también es lo de menos. Simplemente había que valorar lo que perseguían y contra quién lo defendían.

lunes, 15 de febrero de 2010

Ala, ¡ya pasó!



“Tanto pensar y luego se pasa en ná”. Ese fue el comentario más repetido en la tarde de ayer. Y es verdad. Han sido semanas de planear e imaginar cómo serían estos tres días. Es difícil acertar y creo que este año incluso hemos superado las expectativas.

Los espantapájaros fueron los líderes de la noche del viernes, aunque no quedase reflejado en los concursos; nosotras lo sabíamos. La multitud se ponía nerviosa cuando pasábamos luciendo camisas de cuadros, pájaros rebeldes y paja. Algunas creábamos un poco de confusión y conseguíamos pasar desapercibidas bastante tiempo. Otras no lo consiguieron, pero es normal, la noche iba pasando y la máscara se descolocaba hasta dejar más superficie al descubierto que tapada. Como imaginábamos, acabamos sin restos de paja y con nuestros animalejos asesinados, perdidos o regalados. Y nuestra mascota....¡puf!, la perdí un momento de vista cuando miré al cielo para comprobar que nevaba y desapareció.


El sábado dejamos paso al glamour después de pasar el día disfrazadas con cualquier cosa de otros años. Mixtas en el sofá a la hora del café, todo un lujo. Ya de noche, trabuco en mano, a matar a todo el que se moviera. Se puede decir que me quedé sola. Antes cantamos “para chururu churuuuu”, “el tumbao” y “muebles El Molinero”.

Y por último el domingo de resurrección, de desfile, de muuucho frío, de paseo y de pensar en el carnaval 2011. Ya hay ideas, por supuesto, y son buenas. Habrá que venderlas. Ahora toca ver fotos, propias y ajenas, y recordar con ellas todos los momentos vividos.