viernes, 13 de noviembre de 2009

Que sí se note


Llega un nuevo viernes y, como diría Manolo, "salgo a dar una vuelta". El destino es el mismo de siempre, aunque no por monótono deja de ser interesante. Para culminar esta semana en la que han sucedido cosas tan importantes y dar la bienvenida a un nuevo kit-kat llamado Villafranca qué mejor que una canción. ¡Y vaya pedazo de canción!


Sin duda, Alejandro Sanz ha vuelto a hacer un disco como los de antes, como los que ponían la piel de gallina al escuchar cada uno de sus temas. Aún no lo he escuchado entero, pero este "Sin que se note" me encantó desde la primera nota.





Y de toda la letra, me gusta especialmente esta parte porque, en realidad, sí queremos que se note.


"Se ha deshecho del disfraz con el que oculta su mirada
Se ha entregado a la ilusión de pelear por lo que ama
Corazones que se buscan en aquellas madrugadas
Son corazones, son montañas
Que no se esconden, que se hablan
Sin que se note"



jueves, 12 de noviembre de 2009

La lista de fallecidos sigue creciendo ocho años después


Es curioso. Estaba viendo el documental “102 minutos que cambiaron América” y he hecho un parón para mirar el periódico en Internet, justo en una escena en la que miembros del cuerpo de bomberos de Nueva York intentan refugiarse de la avalancha de polvo y escombros que provocó la caída de las Torres Gemelas. Un titular de la sección “Internacional” me ha llamado la atención:


“Los héroes del 11-S se enfrentan ahora al cáncer provocado por las tareas de rescate”


Al tratarse de un documental grabado durante y después de los ataques al World Trade Center, quienes en él aparecen pueden ser los sujetos de esta noticia. Fueron ellos los que se quedaron entre las torres y el perímetro de seguridad marcado para el resto de la población y, por tanto, a quienes más afectó la mezcla de combustible, materiales de construcción y otros productos como el plomo o el mercurio. Además, su trabajo en los días posteriores al ataque terrorista en la ya Zona Cero seguía exponiéndoles a esas inhalaciones tan contaminantes.


Como dice la noticia, muchos de ellos están falleciendo ahora como consecuencia de enfermedades contraídas durante esos días. Y es que ya lo decían en una de las múltiples grabaciones sonoras que componen el documental que ahora continuaré viendo: “Hoy es 11 de septiembre, un día que no se olvidará jamás”. Quienes vivieron aquel terror en primera persona y aún pueden contarlo asentirían al escuchar esta frase. Algunos de ellos, los bautizados desde entonces como héroes, tendrán además la duda de si pagarán con su vida el haberlo vivido tan de cerca.




Hasta ahora aproximadamente 820 policías y bomberos han fallecido como consecuencia de esos atentados, pero parece que el listado seguirá abierto.



martes, 10 de noviembre de 2009

“Estaba borracho y no recuerdo lo que hice”


Conducir bajo los efectos del alcohol u otras drogas es un peligro para la propia persona y todos aquellos que se crucen en su camino. Llegar a casa con esos mismos síntomas y, además, tener un poco de mala uva, hace que todo el riesgo se vuelque sobre otras personas que convivan con ese individuo o individua. Sin embargo el castigo para cada uno de estos casos es bien distinto. O al menos, lo era hasta ahora.


En muchos de los juicios por delitos de violencia de género el presunto culpable se suele excusar en su estado de embriaguez en el momento del maltrato. Eso les suele ayudar y es la principal arma de los abogados de la defensa. El próximo martes día 17 la Comisión de Igualdad puede concluir con un documento que cambie esta “costumbre”, pasando de ser un atenuante a ser un agravante del delito cometido. Es decir, las penas aumentarán si el culpable comete la agresión tras haber consumido drogas. Hoy se ha planteado en el Congreso de los Diputados, y en tan sólo una semana puede hacerse realidad.


Por supuesto, puede surgir el debate. No quiero mostrar ni un ápice de compasión por quienes asesinan a sus parejas, pero sí cubrir todas las posibilidades. Y es que es cierto que, en algunos casos, estar drogado puede afectar completamente la conducta de una persona que en otras circunstancias no cometería el crimen. Con esto no justifico que sea un atenuante, sino que considero necesario realizar un estudio físico y psicológico detallado de cada presunto culpable para conocer hasta qué punto el consumo de la droga condicionó los hechos.


Sea cual sea el resultado de la votación definitiva, sería un gran paso que no se pudieran reducir o incluso eliminar las penas con sólo una frase bien dicha.


lunes, 9 de noviembre de 2009

El otro muro


¿Por qué nadie mira más allá de Berlín? Programas especiales, reportajes con testimonios repetidos hasta la saciedad, conexiones en directo sobre la señal que muestra por dónde pasaba el muro, viaje de presidentes y muchas otras personalidades relevantes a nivel mundial…. A todos ellos se les olvida que el famoso muro que dividió esa ciudad alemana no ha sido el único de la vergüenza, ni el único de la represión. Hay otros mucho más grandes que quizá por el simple hecho de no levantarse sobre territorio europeo pasan automáticamente a la sombra.


Mientras todas las miradas se centran en el vigésimo aniversario de la caída del berlinés, yo prefiero mirar el marroquí desde Google Maps. Porque sí, se ve perfectamente. Incluso en algunos puntos se pueden intuir las hileras de minas que lo refuerzan a lo largo de sus más de 2.700 kilómetros de longitud.



Cuando este muro se elimine, si es que alguna vez ocurre, quienes hoy ven entre risas cómo un dominó gigante cae en la capital alemana querrán colgarse las medallas. Por ahora ni siquiera reconocen a la RASD; no querrán mancharse los zapatos con la arena de desierto.


Hace un par de semanas escuché a la Secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, en una entrevista en Onda Cero. Presumía de haber sido la primera política en visitar un campo de refugiados saharauis y alzaba la voz al apoyar una futura solución al problema. Eso fue todo. Hoy puede que sea ella la que aparezca ante las cámaras trasladando a todo el mundo la alegría del pueblo español al recordar la caída del muro de Berlín. Ni ella ni ninguno de sus colegas se acordará ya del otro muro.


Una sesión de cine en La Moncloa les puede venir bien.



domingo, 8 de noviembre de 2009

Cuatro años


¿Tanto tiempo hace ya? Sólo recuerda que no tenía demasiadas ganas de hacerlo. Iba a ser todo bastante distinto, pero no sabía exactamente cómo. Era parecido a una nueva aventura, aunque dejando de lado cualquier matiz de espectacularidad.


-Lo de las cajas es mentira, ¿verdad?

-¿Qué cajas?

-Eso de las películas en las que cajas y cajas se amontonan en el salón de la nueva casa ¿Ahora resulta que eso no pasa en la vida real?

-Bueno, supongo que hay formas y formas de hacer una mudanza.


¿Y de eso han pasado ya cuatro años? Son acontecimientos que se marcan bien fuerte en el calendario pero que, parándonos a pensar en lo que ha pasado desde que sucedieron, parece que han transcurrido sólo meses.


Cada día durante aproximadamente un mes se preguntaba qué significaría ese círculo blanco sobre fondo rojo. A las ocho y media de la mañana le llamaba mucho la atención y cuando por fin esa noche salió de dudas vio que habían hecho una gran campaña. Dice que ahora se acuerda, y se relaaaja.


Ya es viernes. Un nuevo traslado. Y con prisas para ir a pisar el acelerador. Durante poco más de 30 días, contando solamente con los fines de semana, cumplió unos de los numerosos objetivos que se había planteado para ese 2005. Sin duda los más importantes los había conseguido ya, y con nota. Pero ese nuevo reto suponía un gran avance en su nueva vida: desde ese 9 de noviembre ya podría observarla a través del retrovisor. Dicen que no hay que huir de los problemas pero no es tan sencillo. ¡¡Con lo fácil que es apretar con el pie derecho e ir subiendo marchas hasta dejarlos bien atrás!! Ya se cruzarán cosas más positivas.



En esta mirada atrás resulta inevitable pensar en todo aquello que ha dejado de pasar por estar lejos. Pero también es obligatorio rememorar todo lo que ha ocurrido gracias a esa mudanza sin cajas de hace nada más y nada menos que cuatro años.