jueves, 10 de diciembre de 2009

Habrá merecido la pena


¡Cuánto tiempo sin salirnos al fresco! La verdad es que la temperatura no acompaña y los puentes de diciembre, a veces, son especialmente largos. Pero no por ello dejan de pasar cosas a nuestro alrededor que merezcan ser analizadas.


Para mí una de las más importantes es la protesta de Aminetu Haidar, que continúa 25 días después de iniciar su huelga de hambre. Durante todo este tiempo este acontecimiento ha abierto telediarios, ocupado portadas de periódicos y centralizado debates y tertulias. Para algunos, cansino; para otros, irrelevante; para muchos más, necesario y evitable. Me apunto en este último grupo. Ya somos demasiados los cobardes que habitamos este mundo como para que, encima, no queramos escuchar ni ver lo que otros sí son capaces de hacer por defender sus principios y reivindicar sus derechos. Yo sería incapaz de sacrificarme ni tan siquiera la mitad de lo que lo está haciendo Haidar. Por eso creo que, sea cual sea el final de esta historia, habrá merecido la pena.


El conflicto del Sáhara Occidental es para muchos desconocido y para otros está olvidado. Por tanto, hay que darlo a conocer y recordarlo. Sólo por el hecho de que dos o tres personas pregunten “¿Qué pide esa mujer?” o “¿Por qué es tan cabezona?” se puede decir que la activista saharaui está consiguiendo uno de sus objetivos. La violación de los derechos humanos en esta zona de África comienza cuando el mundo entero realiza preguntas como esas. No sabemos qué es lo que pasa. No sabemos que aún hay personas a las que se les niega su nacionalidad y se les impone otra distinta. No sabemos que, mientras tanto, quienes dicen apoyarles se dan la vuelta y prefieren hacer reverencias a Mohammed VI. Para que nos enteremos de todo esto personas como Aminetu Haidar tienen que sacrificarse “hasta la muerte”, como ella mismo dijo al comenzar su hasta ahora última protesta.



Espero sinceramente que esta historia no concluya con el fallecimiento de Haidar. Pero si la falta de acuerdo entre los gobiernos implicados acaba provocándolo, seguiré pensando que habrá merecido la pena porque, con mayor o menor acierto, contesté a esas dos preguntas.


***Claves del caso Haidar***


***Conflicto del Sáhara Occidental***