La verdad es que tenía dudas. Hacía mucho tiempo que el Barça no jugaba un partido con tanta presión; nos tiene mal acostumbrados. Pero al final todo ha ido bien y no es sólo la buena noticia de la victoria, sino que son varios los motivos que hacen que el aficionado culé pueda estar contento.
Lo primero es que el buen juego que a otros les falta sigue ahí, como se ha demostrado en el segundo gol, obra de Pedro. Además, este partido le ha venido muy bien al vestuario porque no ha sido necesaria la presencia de Messi e Ibrahimovic, algo que sin duda puede ayudar a ponerlos a punto para el encuentro contra el Real Madrid. Y eso de la Gripe A…¿qué es? Parece ser un virus gracias al cual los jugadores azulgranas recargan las pilas a tope, como le ha ocurrido a Abidal. Y otra buena noticia, por supuesto, es que en el Camp Nou no se deja respirar a los ex. Ni Eto’o, ni Motta (que casi nos regala una muy buena celebración de gol de Piqué sin camiseta) ni mucho menos un tal Quaresma han podido llegar ni una sola vez a la portería de Valdés.
Al final del partido, un poco de tensión. Y nos la ha brindado el propio portero del Barça con esos golpeos de balón con los que todo el campo enmudece. Por lo demás, todo son buenas noticias.
¡Ah, por cierto! Aviso a los navegantes que se sientan en El Batiente: el Inter ha jugado de blanco, ¿no?
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